La NASA tiene un emocionante plan en marcha llamado Artemis II. Esta misión está programada para llevarse a cabo a finales del próximo año. Como parte de este plan, la agencia espacial enviará a cuatro astronautas a la órbita de la Luna en la segunda fase de la misión Artemis, que está programada para noviembre de 2024. Esta es una de las muchas misiones emocionantes que la NASA está llevando a cabo al mismo tiempo, y marca un paso importante en su regreso a la Luna.
Bill Nelson, quien lidera la NASA, ha presentado de manera oficial a los cuatro astronautas que tendrán la emocionante oportunidad de viajar al espacio en la misión Artemis II. Además, se dio a conocer la nave espacial que los llevará en esta aventura, la Cápsula Orión. Este es un emocionante paso adelante en los esfuerzos de la NASA para explorar el espacio y llevar a cabo misiones emocionantes, como parte del programa Artemis de regreso a la Luna.
Además de explicar los procedimientos y protocolos en este tipo de misiones, Bill Nelson, el líder de la NASA, compartió el auténtico propósito detrás de este proyecto de la agencia espacial estadounidense.
Después de más de cincuenta años de ausencia, la NASA está retornando a la Luna. Este regreso plantea una gran cantidad de investigaciones y exploraciones en la superficie de nuestro satélite natural, incluyendo la posibilidad de encontrar agua.
No obstante, para Bill Nelson, el desafío real reside en que los seres humanos aprendamos a vivir en ambientes distintos a la Tierra. Esto se piensa en función de misiones más ambiciosas, como un eventual viaje a Marte, por ejemplo. Este proyecto en la Luna es un paso esencial hacia la preparación para exploraciones aún más lejanas en el espacio.
Más específicamente, el propósito fundamental de esta misión es permitir que los seres humanos adquieran la experiencia necesaria para vivir en entornos de espacio profundo durante extensos periodos de tiempo. Esta experiencia en la Luna nos brindará conocimientos esenciales para futuras misiones espaciales, como la posibilidad de viajar y establecernos en lugares aún más alejados, como Marte.
Así es, uno de los principales objetivos de la misión Artemis II es recopilar datos esenciales que servirán como base para la planificación y preparación de futuras misiones, incluida la instalación de bases en el polo sur de la Luna. Estos datos nos ayudarán a comprender mejor el entorno lunar y a desarrollar las tecnologías y estrategias necesarias para establecer una presencia sostenible en la Luna en misiones posteriores, como la misión Artemis III. La idea es avanzar gradualmente hacia la creación de una infraestructura que permita la exploración y la investigación en la Luna, allanando el camino para futuros viajes espaciales más allá de nuestro satélite natural.
