Si lo tuyo son los fenómenos naturales curiosos, te encantará saber sobre la montaña de sal de Cardona, en Cataluña. Esta montaña es especial porque es un tipo de formación geológica llamada diapiro salino o domo de sal que, por sorprendente que pueda parecer, crece más cada vez que llueve.
Hace alrededor de 40 millones de años, el mar se fue y dejó mucha sal. Con el tiempo, la sal se convirtió en una montaña debido a la erosión y los movimientos de la tierra. Hoy en día, la montaña de sal de Cardona tiene unos 120 metros de altura y unos 2 kilómetros de largo. Es un ejemplo fascinante de cómo la naturaleza puede crear cosas asombrosas.
La razón detrás de este interesante fenómeno se debe a cómo está hecha la montaña, junto a un proceso llamado halocinesis o diapirismo. Debido a que la sal en la montaña se disuelve en agua, cuando llueve, se mete por las grietas de las rocas. Luego, al llegar a las capas más abajo, la sal se vuelve sólida de nuevo y empuja hacia arriba el resto de la montaña, lo que la hace crecer algunos centímetros cada año.